El equipo de trabajadores sociales de Outreach acude diariamente a aldeas remotas para visitar y dar asistencia a personas con discapacidad y a sus familias. Primero entienden sus necesidades en las visitas de seguimiento regulares y, una vez entendida su situación, se diseña un plan de ayuda con programas de reparto de arroz, construcción de casas y cuartos de baños, acceso a educación, salud y empleo.

Nuestro objetivo es proporcionar una educación digna, y lograr las condiciones adecuadas para que las personas con discapacidad intelectual tengan una mayor participación en las actividades sociales y económicas de sus familias y comunidades, de forma que aumente su autoestima, su dignidad y el respeto que merecen.

Asimismo, se pretende aumentar el conocimiento y crear conciencia en las familias, comunidades y el gobierno sobre la las personas con discapacidad intelectual y la atención que requieren a través de actividades de sensibilización.

El Centro Arrupe acoge a chicos y chicas con discapacidad física con el objetivo de garantizarles una educación de calidad, así como apoyo constante durante su desarrollo. A las familias de estos niños también se les apoya mediante ayudas financieras para el emprendimiento, la construcción de viviendas o mediante la subvención del coste de llevar a sus familiares a la escuela así como la compra de bicicletas y material escolar para los demás niños de la familia.

Al finalizar sus estudios en el colegio, muchos de estos jóvenes siguen sus estudios en la universidad o acceden a centros de formación profesional. Además, reciben apoyo para encontrar trabajo, algunos dentro de los equipos de la Prefectura o en las empresas sociales que son iniciativa de la Prefectura.